La fallida alerta de la Onemi sigue dando que hablar. Ayer, el ministro del Interior, Rodrigo Delgado, condenó el hecho y lamentó "las externalidades, que la gente haya tenido que evacuar de manera intempestiva".

Además, el secretario de Estado explicó que el envío de mensajes se segmenta de diversas zonas del territorio nacional, y que "el segmento de la Antártica no se había utilizado antes (...) Por alguna razón se conectó con los otros segmentos".

También dio a conocer que se descartó "que el error esté en el operador SAE de la Onemi. El error ocurre cuando la empresa externa tiene que enviar la información a servidores que están fuera de Chile".

De hecho, reveló que "está descartada la intervención humana, fue un error de sistema". En este sentido, se apuntó a la empresa Global System, filial del Grupo Rebrisa S.A.

Habló la empresa

Álvaro Güell, director de Grupo Rebrisa, explicó a La Tercera que el error se originó en la actualización de un software de origen israelí que interpretó que, desde Alto Hospicio a la Antártida, ocurriría un maremoto.

"No hay nada culposo o que se haya hecho mal. Hoy se sigue haciendo una investigación detallada y la misma Onemi dijo que el software está funcionando perfectamente. La Onemi lo opera muy bien y tiene gente capacitada. Este es un software que es utilizado en muchos países y que permite salvar vidas ante catástrofes naturales, como incendios, terremotos y maremotos", precisó Güell.

De paso, aclaró que "en este caso el error fue por un exceso al comunicar el aviso de alerta a más áreas de las que se debía".

"Estas cosas pasan"

"Claramente no es el óptimo y nunca ha operado en exceso. Es una lástima, porque hubo gente que se asustó, pero no generó mayores problemas", sostuvo.

Además, destacó que "estas cosas pasan, lo que hubiera sido crítico es que el sistema no hubiera enviado ninguna señal. El sistema siempre ha funcionado bien con incendios y aluviones. La idea es que la Onemi tenga un sistema de alerta temprana".