Dos frases que postulan a una Gaviota de Oro en la próxima edición del Festival de Viña, según el comentario casi al unísono en las redes sociales, se escucharon ayer en la Comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados, donde se aprobó el primer paso de la tramitación para la reducción de la jornada laboral a 40 horas.

La tensión se vivió desde el primer minuto, cuando los parlamentarios de Chile Vamos trataron de bajar la discusión extraordinaria al exponer que hay otros proyectos del Gobierno con urgencia. Pero fallaron.

Ya en la discusión, el ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg, y el diputado UDI Patricio Melero argumentaron que de aprobarse la modificación al Código del Trabajo, la Roja no podría jugar más una Copa América o que los trabajadores de Conaf no terminarían de apagar un incendio porque en algunos casos sus funciones excederían su horario laboral, respectivamente. Pero volvieron a fallar.

Sus intervenciones fueron duramente criticadas en las redes sociales y encendieron el debate.

Luz verde

Llegada la hora de la verdad, el voto clave para que la iniciativa pasara a la Sala de la Cámara de Diputados lo entregó Gabriel Silber (DC), luego que su partido acordara con la "bancada transversal" establecer una gradualidad de cinco años para que las pequeñas y medianas empresas (pymes) puedan rebajar la jornada laboral en ese plazo.

Al final con 7 votos a favor y 6 en contra, la Comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados aprobó el segundo numeral del proyecto que reduce la jornada laboral de 45 a 40 horas, que es considerado el "corazón" de esta iniciativa impulsada por el Partido Comunista.

También se aprobó el artículo 1 del proyecto, pasando a debatirse un artículo transitorio que establece que no se reducirán los salarios si se establece este cambio.

Claro que al final el proyecto no se despachó, por acabarse el tiempo destinado para esta instancia.

¿De qué se trata el proyecto?

1. El proyecto de la diputada Vallejo propone la reducción de la jornada a 40 horas semanales. Esto significa que deberán ser distribuidas por igual en los cinco días (o seis) de trabajo.
2. Sería una reducción inmediata, menos para las pymes que tendrían un plazo de cinco años para ajustarse gradualmente.
3. La hora de colación se considerará como parte de la jornada de trabajo. Además no contempla reducción de salario.
4. Generaría entre 200 y 300 mil puestos de trabajo, pero el ministro de Hacienda dice que destruiría 300 mil empleos.