Gritos y censura a diputados: Lectura de declaración de la Cámara de 1973 causó estragos en el Congreso

Lorena Pizarro con un cartel mientras Gonzalo de la carrera la graba. Foto: Pablo Ovalle | Agencia Uno.

La iniciativa impulsada por parlamentarios republicanos terminó siendo aprobada gracias al apoyo de Chile Vamos. La situación generó protestas del oficialismo, quienes levantaron pancartas de detenidos desaparecidos.

La oposición logró su objetivo. En la antesala de la conmemoración de los 50 años del Golpe de Estado, la Cámara de Diputados aprobó que sea leída intégramente una declaración de la cámara baja realizada en 1973, la cual en su momento fue impulsada por la Democracia Cristiana y el Partido Nacional. Este último estaba constituido por dirigentes que terminaron creando a Renovación Nacional.

La declaración en cuestión se gestó a través de un proyecto de resolución que el 22 de agosto de 1973 declaró como inconstitucional al gobierno del presidente Salvador Allende.

A grandes rasgos, dicho documento cuestionaba al gobierno de la Unidad Popular, asegurando que estaba buscando instalar un “sistema totalitario” para “conquistar el poder total”. Su recuperación fue impulsada por legisladores del Partido Republicano.

En ese escenario, según el propio presidente de la Cámara de Diputados, Ricardo Cifuentes (DC), aquella antigua declaración fue una “luz verde” para concretar el posterior golpe militar.

Lorena Pizarro con parlamentarios con carteles de detenidos desaparecidos Polemica por lectura de carta en el congreso nacional. FOTO: PABLO OVALLE ISASMENDI/ AGENCIAUNO

“Justicia, verdad, no a la impunidad”

Posterior a la aprobación de la lectura, las discusiones, gritos y momentos álgidos marcaron a la jornada legislativa.

Por ejemplo, diversos legisladores oficialistas llegaron hasta el Congreso con pancartas de detenidos desaparecidos, lo que implica multas en el Congreso.

De ahí que el diputado Cifuentes confirmó la censura de la diputada Lorena Pizarro (PC), quien levantó una pancarta frente a la mesa directiva, al igual que la de todos los parlamentarios que concretaron la acción que ahora es definida como antirreglamentaria.

Asimismo, mientras la declaración de 1973 era leída, parlamentarios oficialistas se unieron para interrumpir gritando: “justicia, verdad, no a la impunidad”.

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