De perfecto desconocido, a doble de Frank Ribery, yunta de Catherine Fulop y a histórico ruletero. Así le cambió la vida a José Luis Muñoz, autor del gol que le dio el triunfo a Everton sobre Lanús.
Lejos de su paso por Tercera, desprecio de O'Higgins y posterior portazo en la ñata en Audax Italiano, Muñoz vive días felices junto al mar. Y claro, el Pelao confió en sus cachañas, y a él le bastaron un par de minutos pa' convertirse en leyenda.
"Aún no dimensiono lo que significa mi gol, lo único claro es que se lo dedico a mi abuelita Baldomera", tiró convencido que su actuación sirve para "reivindicar a los jugadores de Tercera".
- Es que ahí hartazo cuesta surgir...
- Es cierto, pero lo importante es no bajar los brazos. En O'Higgins no me quisieron, pero filo, poco me importó. Lo importante es dar pelea y tocar todas las puertas que sea necesario.
- ¿Cómo lo tratan en Viña?
- Muy bien, sobre todo en la pensión de Agua Santa, donde comparto con Floris y Velásquez.
- Ahí lo quieren, pero ni un brillo que le hayan puesto "Ribery", el franchute es entero pifiado...
- No es muy agraciado, pero a mí no me molesta. Es un orgullo que me comparen con él.
- ¿Se encuentra el clon?
- Algo me parezco, me falta el puro tajo y algo de su talento, ya que él es uno de los mejores jugadores del mundo.
- Hable con el "Cóndor" y el tajito está listo...
- Así estoy bien, prefiero igualar a Ribery en lo que es él como jugador.
- Afearse nunca entonces... Con razón le dio el cuero pa' lindorfear a Cathy Fulop...
- Coincidimos en el vuelo, pero la miré de lejitos como todos.