El profe Gustavo Boldrini ha tenido más pegas que Condorito. Fue restaurador de figuras religiosas en Chiloé, carpintero, historiador y ahora hace clases en la Universidad Arcis.

Hace seis años acompañó a un estudiante de arquitectura que realizaba un estudio en terreno en el Norte Chico y Boldrini se topó con una leyenda que después siguió en las páginas del diario pop. Se trataba de los "Chuchetas del Río", una banda de cuatreros buenos para el copete y las armas que asoló la región hasta que en una lenta agonía fue desarticulada por la policía.

"Salía información bastante espectacular de balaceras, arrestos y huidas por los cerros. Todo eso lo hacía muy atractivo por el modo humorístico y popular que tiene La Cuarta", explicó.

Boldrini cachó que la historia era bacán y decidió crear su propia banda, que es la protagonista del libro "¡Chuchetas!".

Al profe le llamó la atención el "alto grado de nobleza" que descubrió en los cuatreros. "Son gente muy parsimoniosa, bien educada, que tiene muy buenos caballos y monturas.

- ¿No son delincuentes comunes?

-No, porque uno está acostumbrado a ver un delincuente que está muy menoscabado, sin embargo, acá eso no calza. Las causas de esto están mucho más atrás.

- ¿Qué tanto?

- Es una subcultura que está muy en decadencia, porque los antepasados de ellos fueron ganaderos. Fue gente que manejaba piños legalmente, pero, por la reforma agraria, los predios fueron divididos y ya no sustentan una economía ganadera. Esta gente se quedó sin nada.

- ¿Su forma de vida desaparecerá?

- Sí, está condenada a la extinción. La ganadería como economía ya casi no se sustenta. En el norte, habrá puros chivitos y algún burro, pero estos animalitos no se pueden desplazar, porque el Norte Chico está siendo cubierto de paltos y frutales.

- ¿De dónde viene la palabra "chucheta"?

- Viene del genovés "sciuscetta", que es "hablar al oído", decir una cosa bajito; en el fondo, es delatar, como sapear a alguien. Lo trajeron los italianos en el siglo XIX cuando llegan a Buenos Aires. La palabra pasó a designar a alguien que actuaba doblemente. Eran personas que te estaban sapeando y, por otro lado, como eran italianos, vestían con mucha elegancia.

- ¿Tiene algo de chucheta?

- Puede ser, porque he trabajado en la academia y me gusta el hueveo. Ahí habría una dualidad conductual.

"NEGOCIO" LES DURÓ 40 AÑOS EN NORTE CHICO

Entre 2004 y 2005 la policía desarticuló una banda que asoló el Norte Chico por 40 años.

Los "Chuchetas del Río" sembraron el terror a caballo, se escondían en cuevas, en matorrales, evitaban rutas conocidas y robaban animales a mano armada para faenarlos y vender la carne.

El desmantelamiento de los chuchetas comenzó a fines de octubre de 2004, cuando Carabineros detuvo a Óscar Adán Velasco Guerrero (30) y a Alejandro Díaz Valdivia (36).

El 19 de diciembre de ese año, cayeron por abigeato los cabecillas Pedro Pablo Velasco Guerrero (21) y Narciso Velasco Guerrero (32).

El patriarca de los cuatreros era Pascual Velasco, que inició el negocio a principios de los años ´70 y ahora está retirado de puro viejo que se puso de tanto vacilar a caballo.