Se suponía que el pasado sábado debía ser otra noche más en la tranquila pega de recolector de camarones para el ovallino José Castillo, quien hace 35 años hizo de estos crustáceos el sustento de su hogar.

Sin embargo, todo cambió cuando el titán, en medio de la oscuridad a la orilla del río Limarí, se topó con lo que en principio pensó que era un bolsa azul.

Al acercarse con su linterna y su traje especial para aguantar el frío del agua, casi se va de espaldas al cachar que lo que sus ojos estaban viendo era nada menos que una langosta de una pigmentación completamente azul.

El crustáceo, una especie totalmente extraña, del cual sólo se han encontrado ejemplares en algunas partes del mundo, tendría ese color bullanguero debido a la producción excesiva de una proteína que le da el aspecto azulado.

Tan cuática es la langosta que según un estudio de la universidad gringa de Maine este caso sólo se da uno en dos millones.

Negocio

Y aunque este ejemplar está como para un museo, lo cierto es que José Castillo, decidió hacer negocio con el bicharraco, ya que necesita lucas para comprar cosas para su casita.

Por lo mismo, no encontró nada mejor que promocionarlo como la mascota ideal para un hincha azul, ese que deja hasta la familia botada con tal de seguir al club de sus amores.

El socito pasa el dato y advierte que lo está cuidando más que a hijo único, ya que lo alimenta con pollito molido y lo suelta en una fuente con agua para que chapotee de lo lindo.

- Oiga, ¿es primera vez que atrapa a un bicharraco de estas características?

- Así es, nunca había pillado algo así. Yo siempre voy de noche a buscar camarones y de repente me topé con una bolsa azul. Me acerqué y me di cuenta que era una langosta completamente azul.

- ¿Y está dispuesto a soltar a la regalona?

- Pese a que soy de la Chile, igual nomás la estoy vendiendo porque necesito el dinero y no tengo espacio para tenerla. El que la quiera la puede venir a ver y le hago un tour para que sepa de dónde la saqué.

- Por lo visto la tiene como tuna...

- Está súper bien, incluso la alimento con pollo molido.

- ¿Y le puso nombre?

- No, para no encariñarme con ella.

- ¿Y qué tan grande es?

- Pesa aproximadamente unos 300 gramos. Yo antes había capturado algo similar en cuanto a peso, pero nunca con ese color.

- No va a faltar el hincha azul que cambie el chuncho de peluche por su langosta azul como mascota...

- Esa es la idea, es la mascota perfecta para un hincha de la “U”, porque nunca van a encontrar una langosta con los colores azules. Totalmente bullanguera.