Líderes religiosos le pidieron perdón de rodillas a Osorno

Durante los tres años en que el obispo Juan Barros estuvo a cargo de la Iglesia osornina, la comunidad católica de la capital provincial se dividió entre quienes mayoritariamente pedían la remoción del cura, acusado de ocultar los abusos sexuales de Fernando Karadima, y un grupo de fieles que lo apoyaban.

El Papa aceptó la renuncia de Barros, nombró provisionalmente al obispo Jorge Concha Cayuqueo como administrador apostólico, y también mandó a la cuidad al arzobispo de Malta e investigador de abusos sexuales en la Iglesia, Charles Scicluna, y a su ayudante, el sacerdote catalán Jordi Bertomeu .

Los tres religiosos mencionados participaron ayer de la llamada misa de la reconciliación en la catedral San Mateo, que se repleto como no lo hacía hace mucho tiempo con más de mil personas, y la ceremonia la encabezó el chileno.

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Al inicio de la misa, Jorge Concha Cayuqueo asumió formalmente su cargo y fue recibido entre aplausos. Posteriormente realizó la homilía llamando a la unidad y a "aprovechar este tiempo para crecer humanamente y como comunidad de creyentes".

El momento más emotivo ocurrió cuando Scicluna, Bertomeu y Concha se arrodillaron para evidenciar de esa forma el perdón que el Papa Francisco le solicitaba a la comunidad católica.

Scicluna manifestó en la misa que partió a las 11.30 que: "El Papa Francisco me ha encargado pedir perdón a cada uno de los fieles de la diócesis de Osorno y a todos los habitantes de este territorio, por haberlos ofendido profundamente", en relación a que el 2015 el argentino trató a la ciudad de "tonta y zurda", en medio de las protestas en contra de Juan Barros.

"Hemos venido a orar para que el Señor nos ayude", añadió el arzobispo de Malta, para decir enseguida "que es una felicidad muy grande cuando los pueblos saben encontrarse".

Laicos

Los "laicos de Osorno", que lucharon contra Juan Barros durante los tres años de su gestión, también llegaron al lugar.

Mario Vargas leyó una declaración pública en la que expresó que como agrupación "hemos decidido dar un paso y luego de tres años, ingresar a nuestro templo catedral y participar en la santa misa en el día del Señor".

El líder del grupo, Juan Carlos Claret, además reclamó porque Barros no ha sido sancionado, y manifestó que "fácil hubiera sido para nosotros decir que nos vamos a ausentar, pero queremos manifestar que durante estos tres años, más que pelear por lo que hemos odiado, estamos peleando para defender lo que amamos, y es por eso que estamos adentro".

"Jorge Concha va a tener una gran tarea que es esclarecer los hechos para buscar la verdad", agregó Claret.

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