Apenas a una semana y poco de que inicie el campeonato nacional —claro, siempre y cuando se levante la paralización del Sifup—, el jefe de la Comisión de Árbitros de la ANFP, Roberto Tobar, resolvió el despido de quince jueces, medida idéntica a la que adoptó hace un año, a comienzos de 2023.

Tras llevar adelante un test en el que se evaluó el apartado físico y el manejo de la teoría para contrastar el nivel, consigna El Mercurio, los quince árbitros reprobaron y, en consecuencia, recibieron el sobre azul.

Ellos son: Ángelo Hermosilla, Constanza Salinas, Denisse Rivera, Eugenia Mondaca, Henry Pastor, Julio Abdala, María Araya, Rubén Peña, Fabián Pizarro, Monserrat Maturana, Madelaine Rojas, Fabián Tapia, José Vergara y Daniel Vargas.

Habrá, también, otros movimientos, como el caso de Felipe Jara, quien dejará de arbitrar en Primera B y pasará a formar parte de los jueces asistentes en la élite del balompié nacional. A pesar de su larga trayectoria, se estimó que aún tiene las herramientas para ser un aporte en primera.

Claudio Cevasco, en cambio, recibió una propuesta para continuar ligado con una posición en el VAR, pero el exfutbolista de 35 años bajó el pulgar, de modo que no seguirá ejerciendo.

Todas estas decisiones forman parte del desafío que se planteó Tobar de rejuvenecer el referato nacional y, por supuesto, elevar el nivel.

Para ello, ascendió a Matías Assadi, hermano del talentoso volante de la “U”, a Primera B, y en el caso de la división de honor, hizo lo propio con Mathías Riquelme, Reiniero Alvarado y Gastón Philippe.

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