Paracaidista relató minuto a minuto su accidente en el Nacional

La última fecha del Transición fue dolorosa para la "U", literalmente. Y más para el hincha y suboficial de Carabineros en retiro, Miguel Ángel Concha. Es que no bastó con el gol de penal de "Pajarito" Valdés en el Ester Roa y la formación chuncha sin Pinilla ni Ubilla.

Además, en el entretiempo del pleito con Iquique y cuando preparaba un show desde el aire, ocurrió un accidente: su paracaídas se chispoteó y se dio el tremendo porrazo sobre los estáticos de publicidad. Sí, peor que enterarse de un contrato vitalicio a Jarita.

El drama ocurrió el sábado y desde ese día el hombre permanece internado en el Hospital de Carabineros. ¿Hay dolor? Nada, aunque después del golpe quedó como Navarro viendo el conteo de votos en la primera vuelta. "Antes de jubilarme en 1992 me encontré con el Frente Patriótico Manuel Rodríguez, hubo un enfrentamiento, murió mi compañero y a mí me sacaron un riñón por herida de bala. Ni eso me dolió tanto", contó Concha a La Cuarta en la sala 229 del recinto.

- Lo primero. ¿Qué tienes? Luxación de cadera y esguince en la rodilla izquierda.

- A ver, repasemos. ¿Qué ocurrió antes de la caída? ¡Ufff! Primera vez en 20 años que tengo un accidente. Nunca una emergencia o caer fuera de zona. De hecho, saltamos para los 90 años de la "U" en mayo y le di al centro de la cancha. Ahora fue el mismo patrón de entrada. Éramos cuatro paracaidistas, salté en tercer lugar, saqué la bomba de humo, la bandera y entré a la zona. Al ir sobre la galería noté que el paracaídas falló. Había turbulencia y con el calor se desinfló.

- ¿Entonces qué pensaste? Apliqué todos mis conocimientos. Moví un poco el aparato hacia la izquierda, decidí impactar los paneles, porque pensé que eran más blandos. Traté de no levantar los pies, si no alcanzaba a pasar me iba a pegar en el coxis y podría haber sido más grave.

- Pero igual fue un porrazo que se escuchó hasta en Conce... El golpe me dio vuelta, no sé si estaban anclados los carteles. Amigos y expertos dicen que muy pocas veces sucede, pero que es probable que el paracaídas se haya desinflado por tanto calor, no tiene sustentación. Traté de golpearme lo menos posible. Igual creo que fue poco para mi velocidad, entré a 15 o 20 kilómetros por hora.

- Pudo haber sido peor. Exacto, si chocaba contra el arco, que es de fierro, me mataba. El paracaídas se clavó, se fue de punta. Imagínate si me pegaba en la cara o las costillas. También podía quedar inválido.

- ¿Qué tan segura es la actividad? Pese a su alto riesgo, tiene poca mortalidad, se actúa sobre seguro. Hoy saltas con sistemas automáticos, si no abres el paracaídas a cierta velocidad se activa igual. Claro que a la altura que estaba ya no podía hacer nada, había que apretar los dientes y caer de la mejor forma. Lo único que pensaba era no echar a perder el espectáculo.

- ¿Notaste la reacción de la gente? Cuando impacté escuché "uuuh" y cuando me levanté hubo aplausos. Mi hijo fue el primero en socorrerme, también es carabinero y paracaidista, y estaba haciendo control terrestre con la radio. Él levantaba el brazo frente a los hinchas, como diciendo "ese es mi papá". Salté por la "U", nada más. Me tocó la mala suerte.

- ¿Piensas volver a saltar? Claro, pero la idea es analizar antes qué pasó. Hablamos con los otros paracaidistas para ver el salto, todos derrapamos, unos más, otros menos. Voy a recibir críticas buenas y malas, porque ya soy instructor, pero en buen chileno, hay que tener cojones para saltar en un estadio, en la ciudad. Puedes caer en una casa, tendido eléctrico. ¡Pude caer en la galería, habría sido peor!

- ¿Crees que vas a generar dudas ahora? Nooo. Desde el 98 que me dedico a esto, tengo 55 años. Mi instructor fue Iván Zapata, que les ha enseñado prácticamente a todos los personajes en Chile, es del Gope y tiene 31 años de experiencia. Yo cuento con más de 1.200 saltos. Esto es docencia y debe servir la experiencia, porque busqué lo más seguro. Debo explicarle a mis alumnos la mejor forma de enfrentar la emergencia.

- Acá lo acompaña su esposa... ¿Qué le dijo? Verónica se asustó harto. Ella me estaba haciendo un traje de Viejo Pascuero. Con el Club Los Tigres Voladores teníamos un salto planificado para los niños de la municipalidad en Casablanca el 23, pero me lo voy a perder. Lo mismo pasó con Argentina, nos íbamos el lunes a un túnel de viento y perdí todo. Nada que hacer, sólo actitud positiva.

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