El 2005, Juan Carlos Aguayo entrenaba Taekwondo en la escuela Rott tkd, en dependencias de una universidad en la comuna de Maipú, donde se buscan deportivas que puedan optar, a la larga, al sueño olímpico. Pero a pesar de que amaba esta disciplina, Juan Carlos optó por estudiar kinesiología.

Con el paso del tiempo, el bichito por este arte marcial solo se hizo más fuerte por lo que decidió prepararse como técnico.

"Fui un deportista frustrado y fracasado, y esa es la razón por la que quise ser un técnico competente", confesó a La Cuarta.

Para lograr este objetivo, se capacitó con Jeovanni Baeza, quien entrenó a Sebastián Crismanich, que fue campeón olímpico.

"Fueron diversas capacitaciones que realicé con Baeza. Además, miré en qué estaba el Taekwondo internacional viajando el 2010, 2011 y 2012 a una gira europea para aprender de los mejores técnicos del mundo", detalló.

Luego de ese arduo periodo de aprendizaje, su gran oportunidad se dio, finalmente, el 2012. "Ahí se me da la oportunidad de ser el técnico nacional adjunto de la selección chilena, para luego terminar en el año 2014, dedicándome única y exclusivamente a mi club y terminando mi magíster en Medicina y Ciencias del deporte y con ello la publicación de un artículo en la comunidad científica", contó al diario.

Debido a su currículum, ese mismo año logró contar con destacados atletas de esa disciplina del país, además de asesorar a diversos exponentes en regiones.

"En el país hay mucho talento, por ejemplo está Ignacio Morales, Camilo, Pérez, Mario Becerra y Sebastián Navea, entre otros", confesó el entrenador.

Juan Carlos contó que hoy "trabajo arduo en mi club con un equipo muy joven de cadetes, juveniles y adultos jóvenes para la formación de atletas para nuestro país". Justamente, ese trabajo lo llevará la próxima semana a participar de un evento deportivo de la disciplina en Canadá y EE.UU.