Infieles, la serie de CHV, lleva varios años al aire, sin embargo los guiones dejan mucho que desear. Este unitario, donde ni los personajes ni las historias tienen progresión capítulo a capítulo, tienen siempre la misma estructura, donde un hombre o una mujer le será infiel a su pareja con un desconocido que pasará de largo por su vida.

Los protagonistas son siempre de origen humilde, la música ambiental es popular  y las historias son carentes de glamour. No hay novedad al ver que todo capítulo parte con una pareja que se ve en conflicto, lo que le abre las puertas a la llegada de un tercero.

Pero, ¿por qué gusta tanto esta serie? Porque lleva sexo, un enganche que para muchos es suficiente a la hora de evaluar un guión.

A muchos les da lo mismo si los personajes están o no bien creados, mientras la actriz que los represente sea voluminosa. También les da igual si la historia es entretenida o monótona, siempre y cuando el final sea "feliz".

Hace unos años las escenas de sexo eran mucho más explícitas, hoy nos encontramos con imágenes sensuales con uno que otro desnudo. Mientras la gente no mejore su ojo crítico, las series seguirán siendo desechables.