Ni todas las dietas del mundo ni   los ejercicios más peludos para    estar en forma, hicieron que Raquelita Calderón bajara de peso  y quedara con la esbelta figura que siempre ha soñado. Pero no crea que esto bajoneó a la hija de Raquel Argandoña, sino que al contrario, Kel buscó nuevos métodos para quedar tiquitaca. Así fue como la chiquilla sacó la voz y decidió que, aún cuando sólo tiene 17 primaveras, ya era hora de  someterse a un enchulamiento que la dejara matando para el verano.

Pero no crea que esta fue una decisión tomada a tontas y a locas, porque según soltaron varios medios, Raquelita tenía esta idea en su cabecita hace como un año, cuando cachó que por más lechuguita que comiera, el rollito regalón nunca  iba a desaparecer. Fue así como la chicoca habló con mamá Raquel y  ésta le dio la venia para que se recauchara sus muslos y cintura con una liposucción. Y no era pa' menos si la animadora se ha "retocado" varias veces a lo largo de su carrera.  Lifting, abdominoplastía e implantes, son sólo algunas de las operaciones que se le conocen a la animadora.

Pero volviendo a Kel, según contaron algunos sapos, uno de los motivos que la ahora cantante tendría para hacerse este procedimiento, serían  su naciente  carrera musical con la que está muy entusiasmada, y por otra, aumentar su autoestima, ya que según han dicho algunos mal hablados, Kel estaría "obsesionada con su cuerpo". Incluso trascendió que además de la lipo, la cabra también quería ponerse implantes de silicona, pero su madre se paró en dos patas y dijo nones de una.

EL ELEGIDO

El doctor elegido para dejar del guan a Raquelita, sería el cirujano plástico Héctor Valdés, quien operó anteriormente a La Quintrala. La intervención se llevaría a cabo hoy en la prestigiosa clínica del doc ubicada camino a Farellones, posom

Javiera Requena Z.