Espectáculos

El Símbolo: “Nadie puede irse de este mundo sin antes bailar Levantando las Manos en vivo”

Conversamos con Frank Madero, cantante y productor del proyecto noventero cuyas canciones inmortales aun siguen sonando en fiestas de todo el país.

Hay pocas bandas que resuman de mejor manera el sonido de la fiesta noventera que El Símbolo. La agrupación musical liderada y prácticamente encarnada hoy por Frank Madero fue conocida por armar una batería de hits tras otra: Levantando las Manos, 1,2,3, No te Preocupes, Nunca te Decides y Dame Jamón, entre otras, se convirtieron en clásicos bailables que hasta el día de hoy suenan en fiestas, matrimonios y eventos.

La banda ha hecho de Chile un segundo hogar: sus hits los tuvieron participando constantemente de presentaciones, en shows de TV y hasta han pisado dos veces la Quinta Vergara: una vez en solitario en 1999 y en el 2020 de la mano de Pedro Ruminot, que los invitó como una sorpresa en su show.

Y el próximo 17 y 18 de octubre, El Símbolo volverá a las pistas de baile nacionales de la mano de la Fiesta Broadway 90s 00s, que se realizará el viernes 17 en Club Chocolate en Santiago y el sábado 18 en Room Dance en Santiago. Antes de su presentación conversamos con Frank Madero, cantante, productor y alma de El Símbolo, quien nos habla sobre su relación con Chile y lo que podemos esperar de su show.

¿Cuál crees que es la clave para que la música del Símbolo se siga escuchando hoy?

Siempre hubo un cuidado de que la música fuera para todo público. Yo me súper preocupaba de que las letras sean que las pudiera escuchar todo el mundo, no quería cerrarme a una edad o un público, yo quería la mi música la pudiera escuchar todo el mundo: mis primitos y mi abuela, quería llegar a todos lados.

Y la calidad de los temas también es importante. Yo siempre trabajé muchísimo y traté de dar la mejor calidad posible a los proyectos y hoy hay gente que me dice que no suena como música de hace 20 o 30 años, que suena como actual. Levantando las manos suena como un tema que salió hace poco.

Y también hay que seguir trabajando. Hay un montón de temas buenísimos de esa época y ahí como que la banda se disolvió, se dedicaron a otras cosas, no sé, pasaron un montón de cosas. Pero yo sigo viajando, haciendo cosas, haciendo shows y eso tiene que ver con que se siga escuchando.Ves las cifras de oyentes en YouTube y Spotify y es una locura para un grupo que ya tiene 30 años.

¿Y cuál es tu relación con Chile? ¿Cómo has sentido la conexión con el fanático chileno?

El público chileno para mí es especial. Tengo familia, amigos, de hecho ahora que voy me voy a instalar como un mes.

Pero Chile también fue catapulta para mí para todo el resto de Latinoamérica, con el Festival de Viña del Mar en 1999, el último del milenio fue como el empujón que nos dio a mi carrera, por lo que estoy eternamente agradecido.

Chile me abrió las puertas y quedaron abiertas, de hecho hay temas que solo hago en Chile, que sonaron en otros lados pero en Chile los cantan más, como el Dame Jamón. Vas a cualquier parte de Latinoamérica y la gente no se acuerda, pero en Chile los cantan. Se siente como que la gente adopta los temas y eso es lo mejor que le puede pasar a un artista.

Viña del Mar 99 no fue tu última presentación en Viña, ya que el 2020 estuviste en la rutina de Pedro Ruminot ¿Qué recuerdas de ese episodio?

Con Pedro hace mil que queríamos hacer algo juntos, él siempre me estaba llamando para que hiciéramos algo porque tenía este tema de meter música de los 90 para arengar a la gente y yo ya sabía que usaba temas míos.

Él me decía que siempre que tocaba la música de El Símbolo la gente se levantaba, así que me decía que tenía que venir sí o sí.Y cuando surgió lo del Festival de Viña, Pedro me dijo “vienes, no importa cómo pero vienes”. Así que armamos un show sorpresa con varios temas y fue una locura.

Lo mejor creo yo fue la sorpresa de escuchar a Pedro Ruminot cantar, la Quinta Vergara siguiéndolos y después aparecer ahí después de 20 años. Y la gente también tenía el morbo de saber cómo estaba, si cantaba igual, si estaba destruido. Fue muy gracioso.

¿Cómo serán los show que se vienen en Chile?

Es un show que une generaciones porque está la gente que vivió la música de los 90 en su juventud pero también los hijos a los que les pusieron El Símbolo desde chicos para verlos bailar. Siempre llega gente con sus hijos a tomarse fotos y es muy loco.

Pero todo es para divertirse y pasarlo bien. Cantamos todos los éxitos en vivo y además es muy interactivo con las coreografías y todo. Y es como siempre digo, nadie se puede ir de este mundo sin antes haber bailado El Símbolo con el original. Levantando las manos, haciendo los pasitos del Símbolo con el original, es muy divertido y los hacemos bailar a todos.

¿Y deseos de volver algún día al Festival de Viña?

Me encantaría, y siempre están las ganas, las ideas, que te están llamando, pero tendría que ser con algún lanzamiento nuevo, tal vez recopilar un grandes éxitos mundial, porque hay varios temas que han sonado en varios países y en otros no.

Ahora después voy a Ecuador y hay un tema que sonó mucho allá y en Chile no, y allá tiene que ser el primero y el último. Tendría que edificar un grandes éxitos y ver cómo hacerlo, quizás con colaboraciones para que sea algo inolvidable.

Pero lo importante es que aprovechemos los shows de ahora porque como digo, el dicho tendría que ser tener un hijo, plantar un árbol y bailar el Levantando las Manos con El Símbolo.

Las entradas para el show están disponibles en Passline.

Más sobre:El SímboloEntrevistaConciertoClub Chocolate90Frank Madero

Lo último