El príncipe Harry tenía sólo 12 años cuando Lady Di falleció en el trágico accidente automovilístico en un túnel de París, que conmovió al mundo.

En el recién publicado libro “En la sombra”, confesó que pasó años tratando de averiguar qué sucedió realmente la fatídica noche en que perdió a su mamá.

Tanto así, que junto a su hermano, el príncipe William, llegó a manejar a gran velocidad a través del Pont de l’Alma, el lugar del accidente de Diana, para experimentar los últimos minutos de vida de Diana.

Harry dijo que estaba en el castillo de Balmoral en Escocia, con sus abuelos, la reina Isabel II y el príncipe Felipe, cuando se enteró de la muerte de Diana.

“Sin nada que hacer más que vagar por el castillo y hablar conmigo mismo, se apoderó de mí una sospecha, que luego se convirtió en una creencia firme. Todo esto fue un truco”, dijo.

Y agregó que: “Por una vez, el truco no lo estaba jugando la gente que me rodeaba, o la prensa, sino mamá. Su vida ha sido miserable, la han acosado y mentido, así que fingió un accidente como una distracción y se escapó”.