José Antonio Neme reconoció que estaba de muerte y que se descargó en las oficinas de Mega. Quería ir como reportero homosexual a cubrir la muerte del Papa.
Confirmando los rumores, José Antonio Neme reconoció que explotó furia en las oficinas de Mega al enterarse que no lo enviarían a cubrir la muerte del Papa Francisco.
A Neme no le quedó otra que sincerarse ante la pregunta de Julio César Rodríguez en el programa de YouTube que ambos conducen.
“Sí, es verdad. Y me mandé mi pataleta, debo decirlo. Me mandé una pataleta brutal, lloré. Te juro, por diosito que me está mirando, por el Papa Francisco que está en los cielos, que es verdad, me dio rabia”, confesó el animador del matinal Mucho Gusto.
“Entré a la pauta, hice ver mi molestia, hice mi pataleta... pero bueno, una pataleta periodística como la hemos tenido todos. Me sentí un poco imbécil después, salí un idiota”, complementó.
Un “maricón” reportando desde el Vaticano
Y es que Neme tenía un anhelo personal por estar en Roma y la sede mundial del catolicismo.
“Es que igual un homosexual declarado, abiertamente enamorado y apasionado por los hombres... yo creo que es provocador que vaya a cubrir una cosa como esa. Los tiempos están para eso", comentó.
“Imagínate un maricón en plena Plaza de San Pedro, cubriendo un cónclave, eso no se había visto jamás. No es usual”, manifestó el comunicador.
Afirmó que, en estricto rigor, él está “excomulgado” de la iglesia. “Porque aunque digan que Francisco fue muy amable, al final nos privó de lo más lindo que tiene esta vida, lo más placentero, el sexo. Decía que los homosexuales son personas y no discrimina, pero nunca permitió que uno fuera un católico homosexual practicante”, reflexionó.
Con todo, para él era una buena idea su presencia en la Santa Sede. “Me parecía una figura interesante para la televisión de hoy”, insistió.