A través de sus redes sociales, el pasado 16 de marzo Sebastián Keitel confirmó la muerte de su hermano Luis (50), quien luchó durante 17 años contra una esclerosis lateral amiotrófica.

Y este martes, durante su entrevista en el "De tú a tú", el ex atleta contó cuáles fueron los primeros indicios que como familia empezaron a notar de la enfermedad.

"A los 33 años le dicen, 'tienes Esclerosis lateral amiotrófica'. '¡¿Qué?!', 'y te quedan dos años de vida' (…) es quedar atrapado en tu cuerpo con tu cerebro al 100% y toda tu musculatura muerta", recordó en el espacio de Canal 13.

Además, Sebastián reveló que en una oportunidad Luis casi atropella a su madre saliendo de la casa en auto. De hecho, esa fue la última vez que se subió a un auto.

Incluso, afirmó que cuando su hermano dejó de comunicarse por su cuenta, estuvo hablando 10 años con voz de mujer. Esto porque el computador que utilizaba para esos efectos estaba programado con una voz femenina.

"Yo tengo más memoria de la voz de Luis con un computador, a través de una mujer, que de su propia voz", le contó en medio de la charla a Martín Cárcamo.

Pero eso no fue todo, pues Keitel también se refirió al recuerdo que tienen los integrantes más jóvenes de la familia sobre su hermano.

"Todos los hijos de él, mis hijos, todos los hijos de los amigos, conocieron a Luchito en cama. Pero yo me trato de quedar no con la muerte de Luis, me trato de quedar con la vida de Luis, de todo lo que… Martín yo creo que a todos nos dejó un mensaje increíble del día a día, de esa lucha, de esa perseverancia, de ese esfuerzo. Luis estaba de acuerdo con la eutanasia pero no estaba de acuerdo en 'él' practicarla si es que hubiese sido legal acá en Chile", confesó.

Las últimas horas de Luis

Por último, también recordó cómo fueron los últimos momentos de Luis. Según recordó, el día que falleció, estaba trabajando en una sesión de la cámara. Incluso, contó que al tercer llamado telefónico de su madre contestó y le contó que su hermano se estaba muriendo. Por lo mismo, colgó y partió inmediatamente donde se encontraba.

"Lo agarré de la nuca atrás, le levanté la cabeza, todos rodeando su cama, sus tres hijos, su señora, mi mamá, el Pupi, mi señora y yo hablándole al oído. Lo único que le decía era: 'ya Luchito descansa, está el papá esperándote, el tata, descansa', y el seguía luchando y seguía luchando y miraba con los ojos como desesperado. Hasta que de repente se murió así, en mis manos", sostuvo.

Eso sí, Sebastián contó que extrañamente no lloró. Sin embargo desde ese momento comenzó su rol protector. "Si yo fallaba, si yo lloraba, si él me veía llorando a mí, yo le iba a fallar a mi mamá, a sus tres hijos, a su señora. Y yo no lloré prácticamente hasta el día siguiente".

Al final, reveló que la grave situación de su hermano lo motivó a transformarse en parlamentario.

"Parte de por qué yo entré a la política fue justamente por decir, ¿qué pasa con las enfermedades raras en este país que no están cubiertas por ningún plan del Estado, ni el Auge ni el Ricarte Soto? Mi primer proyecto de ley fue que el ELA fuera incluido y hoy día el ELA es parte del Ricarte Soto", remató.

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