El español volvió a reafirmar que su romance con Chile será para siempre. Fue condecorado por Viña del Mar, que se vistió de gala para homenajear a su nuevo hijo y visita ilustre, algo que Miguel Bosé supo recibir con cariño.

El cantante habló de todo en la íntima cita que Rafael Araneda y Carolina de Moras condujeron. No dejó ningún tema al azar. Habló de drogas, alcoholismo, locuras, su carrera musical, e incluso, se dio maña para devolverle una broma a Sebastián Eyzaguirre de CQC, quien le regaló unas mallas, similares a las que usó en 1981.

"Si me pongo esto, la Quinta se desmaya. Ahora verán un Miguel Bosé bastante más moderado. Tengo la necesidad de investigarme constantemente", contó entre risas.

Recordó su primera participación en Viña en plena dictadura, asegurando que "Chile pasó por momentos muy difíciles, yo me acuerdo del '81 cuando pise la Quinta Vergara, pero había una consigna sobre la situación política de Chile, que no había que venir y yo me revelé porque no había que dejar a los chilenos solos en ese momento, a pesar de los insultos vine, porque la dictadura de Pinochet fue más dura que la de Franco".

Miguel Bosé: "Seré como Federer"

Lo que tiene a todos expectantes es esta noche en la Quinta. Bosé aseguró que "va a ser tremendamente especial y muy emocionante. He generado un recorrido de canciones que tocan desde un principio mi carrera, siento que hay un sentimiento muto de amistad y lealtad".

Y como el capo español sabe que ser tercero es perder, ser segundo no es igual, que llegar en un primer lugar, se puso una meta especial. "Esta no va ser la última vez que venga a la Quinta, yo seré como Federer, si él tiene 97 títulos y dice que irá por los 100, mañana tendré 10 veces acá y quiero ir por las 12 de ahí para arriba. En algún momento me dejarán Viña para mi solo para tener las seis horas de programas".

Cerró todo con broche de oro al asegurar que "ahora no hago nada porque ya lo he hecho todo, vamos que me he bebido todo lo que he podido, al igual que fumar", cerró el capo que promete suspiros.