Un perrito que fue abandonado por sus dueños porque nació sin las patas delanteras es ahora el objeto del deseo de muchos gringos que quieren adoptarlo.

Turbo, que así se llama el chihuahua de apenas un mes de vida,

fue abandonado en una veterinaria de la ciudad gringa de Indianápolis y los encargados decidieron acogerlo

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Pero no sólo se trató de que tuviera un lugar para permanecer seguro, sino que los responsables del lugar se hicieron el propósito de conseguir que Turbo pudiera caminar y se relacionara con otros perritos.

La primera idea que pusieron en práctica fue instalarle un juguete de dos patas, pero la cosa no resultó muy cómoda. Luego de probar con una y otra idea los veterinarios desmantelaron un helicóptero de juguete y con unos tubos construyeron una especie de carretilla que le permite el chihuahua movilizarse de manera autónoma.

Felices por el resultado, los encargados abrieron una cuenta en Instagram para mostrar los avances que va teniendo Turbo, y hacen lo mismo a través de la página de Facebook de la veterinaria.

Hoy

el chihuahua Turbo es una estrella

y cada día son más los habitantes de Indianápolis que buscan adoptar a este tierno perrito.