En una histórica sentencia, la Corte destituye a Yoon Suk Yeol por violaciones constitucionales, convirtiéndose en el segundo mandatario surcoreano en ser removido por un juicio de destitución.
Este 4 de abril de 2025, la Corte Constitucional de Corea del Sur tomó una decisión histórica al destituir oficialmente al presidente Yoon Suk Yeol, quien asumió el cargo en 2022.
En una declaración emitida por el presidente interino de la Corte, Moon Hyeong Bae, se confirmó que la destitución del mandatario es inmediata y definitiva.
La decisión fue adoptada por unanimidad, con todos los jueces respaldando la sentencia sin emitir opiniones disidentes, aunque algunos de ellos hicieron comentarios adicionales sobre aspectos específicos del caso.
Con esta sentencia, Yoon Suk Yeol se convierte en el segundo presidente del país asiático en ser destituido por un juicio, después de que la ex presidenta Park Geun Hye, quién fue removida de su cargo en 2017.
La destitución de Yoon llega después de la proclamación del estado de emergencia en diciembre de 2024 y a poco más de tres meses de la presentación del proyecto de destitución en la Asamblea Nacional en diciembre del mismo año.
Abuso de poder y manipulación política
La Corte Constitucional fundamentó su decisión en una serie de graves violaciones constitucionales cometidas por Yoon Suk Yeol durante su mandato de tan solo dos años.
Entre las principales acusaciones se encuentran la proclamación injustificada del estado de emergencia, el uso indebido de las fuerzas armadas para influir en el proceso legislativo y la manipulación de resultados electorales.
Estos actos fueron considerados como un abuso de poder que afectó el equilibrio democrático del país.

La sentencia también señala que el ahora, ex presidente, utilizó su autoridad para interferir en el funcionamiento de la Asamblea Nacional y la independencia de otras instituciones clave, como la Corte Electoral Central, con el fin de consolidar su influencia política y alterar el curso natural de los procedimientos legislativos y electorales.
Los jueces de la Corte Constitucional subrayaron la seriedad de las violaciones cometidas por Yoon, destacando que su comportamiento comprometió los principios fundamentales del orden constitucional de Corea del Sur.
Asimismo, la Corte declaró que, debido a la gravedad de las acciones del presidente, su permanencia en el cargo no podía permitirse, ya que representaba una amenaza para la estabilidad democrática del país.
Este fallo y la destitución de Yoon Suk Yeol envía un mensaje claro sobre la importancia de la rendición de cuentas y el respeto por la ley en la política surcoreana, dejando en evidencia la necesidad de un equilibrio adecuado entre el poder ejecutivo y las demás instituciones del Estado.