Medios argentinos aseguran que las mujeres eran sometidas a jornadas de hambre y explotación sexual.
Detienen a 14 integrantes de secta rusa Ashram Shambhala en Bariloche, Argentina, acusados de trata de personas, sometimiento y falsificación ideológica, entre otros delitos.
Konstantin Rudnev, un hombre de origen ruso, fue acusado de ser el jefe de la banda que operaba como una red de explotación sexual bajo una fachada espiritual.
Él simulaba ser dueño de una empresa de cursos de meditación y yoga, por el cual cobraba 5.000 dólares a cada cliente, pero esto sería solo una “pantalla”.
La secta fue descubierta cuando una joven rusa embarazada escapó del hospital de Bariloche, acompañada de dos mujeres tras haber ingresado para dar a luz.
Los médicos informaron a las autoridades y la joven regresó al recinto por complicaciones en el parto, lo que permitió su detención y la de sus acompañantes.
¿Quién es Konstantin Rudnev?
Rudnev es un exsoldado que fue condenado en Europa a 11 años de prisión por abuso sexual y desaparición de personas.
Actuaba en Montenegro, donde tenía su sede, luego de varios años se mudó a Sudamérica desde donde continuó operando.
En Argentina fue arrestado el pasado viernes, en la zona de embarque del Aeropuerto Internacional Teniente Luis Candelaria de Bariloche, junto a ocho mujeres que estaban con signos de desnutrición.
Dentro de la secta existía una jerarquía alimentaria en la que Rudnev era el primero en recibir comida, luego su “primera línea” de seguidores, mientras que las mujeres recibían sobras. “Buscan despersonalizarlas en donde la familia y el grupo pasan por el líder”, señalaron en el programa Mujeres Argentina.
La mayoría de los detenidos son de nacionalidad rusa, otra mexicana y otra con doble ciudadanía (brasilera y rusa).
En el allanamiento al domicilio se encontró cocaína, dos camionetas, 12 celulares, un teléfono satelital, un handy, una antena de Starlink, tres notebooks, 10 chips de teléfono, 14.931 dólares, más de un millón de pesos, pasaportes, tarjetas y documentación de interés.
“La actividad principal era captar víctimas en situación de vulnerabilidad para esclavizarlas, explotarlas laboralmente y/o sexualmente”, señalaron en el mencionado programa.
