Tan en serio se tomó su papel de ruso alcohólico un actor otto que representaba una obra satírica en Frankfurt, Alemania, que antes de terminar su presentación la obra debió suspenderse, luego que el compadre perdiera el conocimiento frente al público, y de puro borracho, nomás.

Es que Marc Schulze es uno de los llamados "actores de método" y profesional como pocos, por lo que durante la representación se tomó cerca de media botella de vodka, así que en la parte final no atinaba pie con bola.

"Fue una actuación muy realista y excelente. Me maravilló lo bien que hacía de un borracho tambaleante y cómo arrastraba sus palabras. Pero luego empezó a olvidar sus líneas y de repente se desmayó", le contó uno de los asistentes al diario british Metro.

Pero recién ahora le llegará la hora de la verdad al beodo Marc, porque el director decidió continuar con las funciones, claro que ahora en vez de copete la botella tendrá pura agüita, así que tendrá que actuar de verdad.