Tras realizar una nueva prueba nuclear, Corea del Norte sacó de sus casillas al presidente gringo Donald Trump. Esta vez, el país asiático encendió las alarmas con el lanzamiento de una bomba de hidrógeno y que puede ser transportada en un misil balístico de largo alcance.
A propósito del hecho, caporales de la Casa Blanca advirtieron que el gobierno de Trump está preparando nuevas sanciones para golpear el comercio exterior de Corea del Norte después de que Pyongyang detonara un dispositivo termonuclear en su sexta y más poderosa prueba nuclear.
En declaraciones al programa "Fox News Sunday", Steven Mnuchin describió el comportamiento de Pyongyang como "completamente inaceptable".
Mnuchin agregó que el paquete de sanciones que se está redactando para consideración de Trump dejará en claro que si algunos países quieren seguir haciendo negocios con Estados Unidos, tendrán que golpear a Corea del Norte económicamente.
El secretario del Tesoro añadió que Estados Unidos continúa trabajando con gobiernos aliados y con China para presionar a Corea del Norte.
TRUMP PUSO EL GRITO
A través de Twitter, Trump tecleó que "Corea del Norte realizó un ensayo nuclear de envergadura. Sus palabras y sus acciones iguen siendo muy hostiles y peligrosas para Estados Unidos".
https://twitter.com/realDonaldTrump/status/904309527381716992
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