Barbie: la muñeca que le enseñó a las niñas que no solo podían ser mamás
En un mundo donde los juguetes definían que los hombres trabajaban y las niñas cuidaban a los bebés, irrumpió la muñeca más famosa del mundo a romper los esquemas con un discurso feminista.
“Se lo que quieras ser”, es el lema de Barbie, una inspiradora frase que muchos ven como solo parte del marketing de la muñeca más famosa del mundo, pero que en realidad va más allá.
En medio de la fiebre por la película protagonizada por Margot Robbie, y dirigida por Greta Gerwig, no es malo hacer un poco de historia de cómo nació Barbie.
Y es que en los 60, antes de que la muñeca llegara al mercado, las niñas solo jugaban con bebés de plástico - y otros materiales- que debían cuidar practicando el único fin que tenían en la sociedad: ser mamás.
Es ahí donde Ruth Handler, la creadora de Barbie, aterriza con una innovadora muñeca que representa todo lo contrario a lo establecido.
Inspirada en su hija, creó un juguete con apariencia adulta que le demostró a las niñas que podían ser algo más que amas de casa, ahora ellas podrían ser profesionales, podían ser lo que quisieran ser.
La revolución feminista desde las jugueterías
Barbie tiene más de 150 carreras, no está casada, ni tiene hijos. Y sí, ha impuesto cánones de belleza imposibles, y fue inspirada en una muñeca para adultos alemana, pero aún así ha envejecido bien: adaptándose a los nuevos tiempos e incluyendo diversidad en sus moldes.
Ruth encontró una muñeca -destinada a los hombres y con connotaciones sexuales- llamada Bild Lilli, en la vitrina de una tienda alemana.
Se inspiró en ella para crear a Bárbara, en honor a su hija. Tenían un precio de tres dólares y llevaba un traje de baño a rayas blanco y negro. Barbie se convirtió en uno de los juguetes más vendidos del mundo: más de mil millones de ejemplares y en más de 150 países.
La muñeca de Mattel ha sido duramente criticada durante años, catalogándola de superficial, mostrar a la mujer como un objeto y ser un estereotipo de la “rubia tonta”.
En 2016, la empresa se hizo cargo de las críticas y dio el gran paso: incorporó muñecas con diferentes contexturas de cuerpo y características físicas.
Algo que también está presente en la película -que se estrena este jueves 20 de julio- y que busca reivindicar el rol de Barbie en la sociedad, una muñeca que tal como relatan en Tendencias, comenzó una revolución feminista desde las jugueterías.
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