Si alguna vez te has preguntado por qué tu mascota parece actuar de manera extraña cuando quieres relajarte, un nuevo estudio sobre el comportamiento animal tiene la respuesta: algunos perros son expertos en fingir enfermedades para obtener más atención.

Según un informe publicado recientemente por expertos en comportamiento animal, los perros han aprendido a asociar ciertos síntomas, como cojear o actuar de manera inusual, con una respuesta positiva de sus dueños, ya sea cariño, consuelo o incluso premios como galletas.

Los perros son grandes observadores y rápidamente entienden que algunos comportamientos provocan una reacción de cuidado por parte de sus dueños.

Por ejemplo, si al simular un malestar reciben caricias y palabras de cariño, no dudan en repetir la jugada. Sin embargo, este comportamiento también puede ocultar una falta de atención o cuidado emocional, alertando sobre necesidades más profundas del bienestar del can.

Este fenómeno no es exclusivo de los perros, pero sí es mucho más evidente en ellos debido a la estrecha relación emocional que desarrollan con los humanos, según consigna Infobae.

Según el veterinario Richard Pitcairn, autor de Natural Health for Dogs and Cats, los perros que fingen enfermedades a menudo lo hacen porque necesitan más interacción y cuidado de sus dueños.

El experto señala que esto es una estrategia que emplean inconscientemente, pues aprenden rápidamente que sus “síntomas” provocan una respuesta inmediata.

Muchas veces se viralizan videos de las mascotas imitando a sus dueños y si bien parece algo cómico, el doctor Pitcairn señala que este comportamiento podría ser una señal de que el animal necesita más atención o que su bienestar emocional no está siendo completamente atendido.

Aunque los perros pueden ser hábiles en la simulación, como cojera o estornudos, hay síntomas que no se pueden imitar.

Heridas visibles, vómitos, diarrea o fiebre requieren atención médica inmediata y no deben confundirse con una simple estrategia para atraer más cariño.

Los veterinarios insisten en observar cuidadosamente a tu mascota y, si tienes dudas, consultar siempre con un profesional.

Cómo prevenir este comportamiento en tu mascota

Para evitar que tu perro recurra a estas tácticas, es esencial asegurarle una vida equilibrada, con ejercicio regular, estimulación mental y tiempo de calidad contigo.

Evita reforzar inconscientemente las conductas de simulación, como ofrecer premios o mimos cuando no hay una necesidad médica real.

Este fenómeno muestra la complejidad emocional de los perros quienes no solo son seres de compañía, sino que también son inteligentes y capaces de adaptarse a su entorno para satisfacer sus necesidades.