Pasadas las diez de la mañana de este domingo y precisamente cuando falta una semana exacta para el balotaje, arribó al país la expresidenta Michelle Bachelet. En silencio, sin emitir declaraciones a la prensa que la esperaba apostada en las afueras del aeropuerto, la Alta comisionada de los Derechos Humanos de la ONU llegó para pasar las fiestas de fin de año junto a su familia.

Al menos, eso fue lo que se informó. Pero durante las últimas horas ha tomado fuerzas el rumor de un eventual encuentro con el abanderado de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric, sobre todo luego de que su fundación, Horizonte Ciudadano, confirmara su apoyo “sin ambigüedades” a la candidatura del diputado magallánico el pasado mes de noviembre.

Al respecto, el contendiente de Boric en la carrera presidencial, José Antonio Kast, alzó la voz y sostuvo que “por el cargo internacional que ostenta (Bachelet), creo que no debiera, a mi juicio, mezclarse en la política contingente”.

“Por su alta investidura no corresponde que entre en la contingencia, y si lo hiciera, nos llevaría a debatir sobre lo que fue su gobierno”, insistió el líder republicano.

Y cerró, señalando que “tenemos que quedarnos con la imagen que Bachelet representa a nivel internacional y debe velar por los Derechos Humanos de países como Venezuela, Nicaragua y Cuba”.