Felices quedarán 700 mil almas de este largo y angosto calcetín de tierra llamado Chile, ya que anoche quedó listoco para que Don Tatán le ponga la firma al proyecto de ley que elimina el cobro del 7% de salud a los jubilados más vulnerables.

La movida corrió por cuenta del Senado, que le dio luz verde a la movida, que se materializará aproximadamente en noviembre de 2011.

Otros 350 mil tatitas verán reducido este cobro de un 7% a 5% en noviembre de 2012.

La cosa partió bien desde que se presentó el martes en la Comisión de Salud, donde salió con todos los pitos y flautas que se requiere, y pasó ayer a la Comisión de Hacienda, que también le chantó el visto bueno.

En sala, los honorables del Senado, tras una maratónica jornada que se extendió por cinco horas, votaron para darle un puntete en la canoa a la cotización que hace 29 años azota a los pobres jubileques y su entorno familiar.

El ministro de Salud, Jaime Mañalich, señaló que se trata de un beneficio "para nuestros abuelitos y abuelitas, que han trabajado toda una vida". Aclaró que los tatitas no dejarán de tener beneficios como comprar los bonos de libre elección y programas de salud en Fonasa.

El presi de la Comisión de Salud, Fulvio Rossi, comentó que "esta eliminación de los descuentos significará un reajuste importante de las pensiones".