“Este álbum está volcado mucho hacia el dolor”: el esperado y melancólico regreso de Marineros

Marineros lanzó su segundo disco, "Al calor de un sol que acaba de morir"
Marineros lanzó su segundo disco, "Al calor de un sol que acaba de morir"

Tras una larga espera, el dúo lanzó a finales de septiembre su segundo disco, titulado “Al calor de un sol que acaba de morir”. Con un sonido más íntimo, lento y pausado, este nuevo álbum refleja los cambios en la banda y su nueva etapa. “Estamos en un completo renacer”, asegura Soledad Puentes al diario pop.

Después de ocho años desde su primer disco, el regreso de Marineros se concretó con la llegada de su segundo álbum,Al calor de un sol que acaba de morir.

Tras una larga espera, el dúo chileno de Soledad Puentes y Constanza “Cer” Espina sorprendió a sus seguidores con nueve canciones que demuestran el cambio y el renacer de una de las bandas más destacadas que irrumpió en la escena nacional en 2015 con su debut O Marineros.

Coproducido junto a Cristián Heyne -con quien trabajaron en su primera entrega- y Soledad, este segundo disco llega con un sonido mucho más acústico, íntimo, cálido y melancólico, una palabra que suele ser utilizada para describir al dúo.

“Ha sido un año bien movido, pero de alguna forma el lanzamiento también ayuda mucho a abrir un espacio, abrir un ciclo, cerrar un ciclo y a empezar otro. Los lanzamientos son así, marcan etapas importantes en la vida, en este caso también, como carrera artística y también en momentos en la vida. Es un momento importante”, afirma Soledad, la guitarrista del conjunto, a La Cuarta.

Marineros lanzó su segundo disco, "Al calor de un sol que acaba de morir"
Marineros lanzó su segundo disco, "Al calor de un sol que acaba de morir"

Han pasado ocho años desde su disco y ya finales de septiembre pudieron lanzar este esperado segundo álbum ‘Al calor del sol que acaba de morir”. Esta frase está en la canción “Rosas”, ¿qué significa en esta nueva etapa que vive Marineros?

—Este nombre es parte de la letra de la canción “Rosas”, que es la canción que sentimos nosotros que es una piedra angular del disco. Es muy importante, la canción final. Y si marca mucho un cambio que hemos tenido musicalmente, en relación a todo lo que veníamos haciendo antes. Una sonoridad que era más digital, más electrónica y también mucho más austera, quizás, en el sentido de la producción musical. Esta ha tenido una evolución que si bien puede sonar mucho más cruda o sencilla, se trabajó con más elementos, con más espacialidad en la grabación, con más instrumentos análogos. Hay varios procesos nuevos, guitarras acústicas que tampoco habían sonado en el disco anterior. Entonces sí hay más materialidad o texturas que marcan una etapa diferente. Es un disco que es mucho más lento, son canciones mucho más melancólicas o de un ritmo mucho más pausado.

“El nombre tiene que ver con algo que sentimos al componerlo, que fue en el momento del 2019 en adelante, que han pasado demasiadas cosas. Desde que empezamos hasta ahora, ha habido un estallido social, una pandemia, un encierro en el que aprendimos a vivir muchas cosas nuevas y muchos cambios grandes como sociedad también. Fueron marcando una transición hacia dejar atrás algo que ya no existe, como que era otra época. Se marcó mucho en estos años. Tiene mucho que ver con eso, como que de verdad estamos sintiendo ese calor de un sol que se murió en el fondo. Eso marca un mundo nuevo, una especie de renacer, de dejar atrás una ilusión que ya no está, que eran unas épocas antiguas”.

—Este disco fue creado durante la pandemia, ¿de qué manera influenció este periodo de encierro en las composiciones?

—Muchísimo, creo que le dieron ese carácter súper íntimo a las composiciones porque si el momento en que estábamos haciéndolo no había mucho ruido afuera, todo estaba detenido, había mucho silencio, ese silencio inquietante incluso. Hacía que todo fuera mucho más dentro de la casa, de un espacio reducido y con mucho silencio. Sí le dio un carácter muy melancólico al disco. De hecho fuimos a grabarlo en el Estudio del Sur, que queda en María Pinto, fuimos justo cuando en octubre se abrió un permiso de poder salir, como que se acabaron esas restricciones y ahí fuimos. Pero, claro, todo estaba restrictivo, sobre todo acá en Chile que fue mucho más duro. Todo era muy extraño, los tiempos.

—En comparación con O Marineros, ¿cómo sienten qué a cambiado su manera de crear y de escribir música?

—Creo que siempre hay muchas maneras, en este caso, nosotras componemos de muchas maneras. No sé si hay alguna tan específica, pero sí creo que hay un poco más de uso del piano, en este disco es muy protagónico. En eso cambió harto, porque si antes era más componer desde la guitarra, que todavía sigue siendo, pero creo que las primeras aproximaciones fueron del piano en este disco. Hay muchas que quedaron solo con el piano, en el caso de “Salvaje y tierno” y “Café melancolía”. Ese fue el elemento más protagónico y que sí cambió la manera de componer, de ser más conscientes de las armonías desde un principio en el piano. Los acordes en la guitarra, hay algunas veces que es un poco más suelto o creo que a mí se me da más fácil la guitarra porque soy guitarrista. Y a Cer igual, porque es el instrumento que domina para la composición. Pero el piano es cómo estructurar más una canción, siento que eso quedó más manifestado en este disco.

—Si bien la palabra “melancolía” ha sido utilizada para describir el sonido de Marineros desde el comienzo, este nuevo disco suena más íntimo e introspectivo. ¿Cuáles fueron los sentimientos que buscaron plasmar en este álbum?

—Completamente este álbum está volcado mucho hacia el dolor, como atravesar un dolor y cruzarlo de una manera muy solemne igual, porque sentimos que no es algo tan desgarrador, no es el momento en que dolor está más crudo, sino que está ya en un momento que uno lo está aceptando y cruzando. Pero de una manera nostálgica también. Sentimos que tiene mucho de eso, de cuando cruzas un momento, una etapa muy dolorosa, pero que a la vez está siendo liberadora, porque es una experiencia que ya aceptaste o viviste desde el momento más fuerte, pero ya puedes hablar de esto, atravesarlo, escribir sobre esto, abrirte. Es el momento que, siento yo, donde hay mucho florecimiento creativo también, en todos los sentidos. Como que son momentos de apertura, mucha apertura de corazón, y uno renace en el fondo, cambias. Cambias mucho de piel, en muchos sentidos. Creo que es eso, un atravesar en un dolor y también de mucha transformación, creo que el disco es eso. Cambiar de mundo.

—“Las canciones tratan acerca de dejar atrás lo que fuimos y mirar dentro de nosotras mismas. Es la muerte de una ilusión y el comienzo de la siguiente aventura”, detallaron en un comunicado por el lanzamiento. Has hablado harto sobre un cambio, han pasado varios años desde el comienzo. ¿Podrías ahondar sobre a lo que se refieren con esta frase?

—Esto mismo de haber pasado tanto tiempo desde que empezamos a hacer este disco, nos hemos dado cuenta de muchas cosas, que probablemente vivíamos en un lugar que creíamos que era una forma, pero se mostraron cosas que nos hicieron ver que estábamos completamente ilusionados sobre algo. Sobre todo los cambios sociales, pretender que todo estaba bien, pero en realidad todo estaba súper mal. Y también creo que eso influye mucho en cada cambio a nivel personal. También tiene que ver con eso, de darse cuenta de cosas y es lo que es crecer. Creías que era de una forma y de repente te das cuenta que no. Esa desilusión a veces puede traer movimientos súper fuertes a nivel emocional, de vida, de relaciones o incluso de espacios. Te das cuenta que todo cambió y se bajan todas esas ilusiones o expectativas que uno tiene en torno a sí mismo o a las personas, incluso los momentos que estás viviendo como sociedad. Luego de eso ves todo más claro y ves qué es lo real.

“Las canciones hablan de eso. “Amarte así”, por ejemplo, es una desilusión de un amor o de una relación que parecía ser algo y, de repente, era nada, no significaba lo que en esa ilusión estaba. “Rosas” también habla de eso, repensar la manera en la que vemos cómo es el amor o cómo el amor romántico tiene que ver mucho con las expectativas, con esperar algo de otra persona. O esa concepción de regalar cosas, el materialismo involucrado en una relación, que a veces es como ese sentido de que las relaciones son demasiado estructuradas en un sentido de propiedad o de necesitar darte algo. Por eso las rosas son un elemento tan simbólico, porque es un elemento romántico cliché de una relación. Pero a veces es más que eso, no querer solo esa superficialidad, sino que realmente ahondar en lo que podría ser una relación. Más enfocado al amor, la profundidad más allá de esas cosas. o intercambios más superficiales, sino más bien ver el amor más libre. Desde algo que no es perfecto, es cambiante, es a veces tormentoso, no es todo rato así como en las películas. Son pequeñas muertes de ilusiones en relación a muchas cosas”.

—¿Cómo sienten que el público ha recibido este disco? ¿Les han llegado mensajes?

—Ha sido muy bueno. Es un disco que nosotras consideramos algo súper potente, importantísimo. Por lo mismo nos dimos el trabajo de tomarnos todo el tiempo que quisiéramos porque de verdad sentimos que queríamos lanzar de manera muy precisa lo que queremos mostrar. Muchas veces pasa que igual está la ansiedad de necesitar sacar cosas o este ritmo de la industria musical que te lleva a una inercia de decir ‘hay que sacar algo, hay que hablar sobre esto, hay que mostrarse aquí o acá’. Pero en el fondo si uno puede ser lo más fiel posible, lo más porfiado posible con su obra, vas a hacer lo que realmente sientes y no las presiones externas. De hecho el disco estaba listo el año pasado, pero sentimos que no era buen momento para lanzarlo. También pensábamos en los ánimos que habían el año pasado, era un año extraño, todo estaba tan disperso. Fue súper caótico. Estaba todo este tema del plebiscito. Sentía que las prioridades se estaban reordenando. (Dijimos) ‘Esperemos, ¿qué más da un año más?’.

“Ha sido muy buena la recepción del disco. Nos han escrito mucho en redes sociales. Es sorprendente ver cuáles son las canciones que más le gustan a las personas. Por ejemplo, una canción como “Salvaje y tierno” que nosotras sentimos que ahora todo es tan rápido o las canciones son más rápidas y este tema es una balada, lenta, con piano, muy romántica. Para nosotras esta es una canción que podría mostrarse y ha sido muy escuchada, una de las más escuchadas del disco. Nos sorprende eso, que la gente o quienes nos escuchan valoran mucho esa entrega. Es como que vuelvan los lentos un poco, sentimos que necesita. Quienes agradecen eso la han podido escuchar y celebrarla mucho. Muy bacán este lanzamiento y también poder volver a re-escuchar las canciones del primer disco. Ha pasado harto que hay personas que han descubierto con este disco, otras canciones que no habían escuchado”.

Marineros. Foto por Norkys Saraí
Marineros. Foto por Norkys Saraí

—Hoy en día la industria es más de sacar singles y no tanto enfocarse en sacar un disco. Muchas de las canciones están hechas para que aparezcan en TikTok, para que sean un trend, y la gente aprecia que haya una banda que se atreva a hacer cosas que no son lo que se está vendiendo, por así decirlo.

—Eso es lo que yo creo, sobre todo en Chile, que un trabajo discográfico es super costoso en todo sentido, energía, tiempo, económico. Es un trabajo que requiere mucha paciencia. Y también existe la otra parte que es hacer una canción “trend”, que también ahora están las herramientas para hacer música de manera muy fácil. En un computador o hasta en un celular en aplicaciones. Es sorprendente todo lo que se puede hacer. La música ahora se está transformando y a veces son canciones de 30 segundos que tú te encuentras que son las que están sonando. Son distintos enfoques. La diferencia es que existe algo más concebido como un todo, que es un disco, concebido como un momento.. Creo que es lo más importante. Ahí hay algo que es muy valorado por las personas que sí aprecian los trabajos hechos con más paciencia.

“Tiene que ver con algo relacionado a la imagen. En nuestro caso, es muy importante la fotografía, lo que significa hacer una portada de un disco, una contraportada o un interior. Hacer lo que significa fabricar diferentes formatos. Lo interesante de este disco es que va a tener una edición en vinilo, eso también agrega una sonoridad distinta en ese formato. Ahora la música digital se distribuye por las plataformas y a veces no tiene la fidelidad que uno escuchó en el master o en el estudio, sino que tiene una compresión que hace que pierda mucho detalle”.

—Han pasado ocho años desde su disco debut, pero aún se han mantenido activas durante todo este tiempo. El año pasado estuvieron de gira por México, Estados Unidos y también se presentaron en Chile. ¿Cómo fue reencontrarse con el público?

—Súper bueno siempre y además que es encontrarse con varios públicos. Tuvimos el año varias cosas. Por ejemplo, hicimos una apertura de un concierto de aniversario de Lucybell, que fue un público muy diferente, de otra generación, pero muy receptivo. Estuvimos también en el concierto de Louis Tomlinson, que ahí es completamente diferente, hay otra generación que nació mucho después. Fue sorprendente porque fue una recepción súper grande, súper buena. Ahí ves que nuestra música también está expandiéndose a diferentes lugares y generaciones, eso la hace ser muy transversal. Y ahí me parece muy curioso ver ese alcance que tiene la música misteriosamente a veces y la hace ser escuchada por personas de una generación o de otra. Y en México siempre es muy bacán poder volver y tocar, porque allá también tenemos un público que es súper fiel, que siempre va y que nos ha escuchado desde que empezamos. En Estados Unidos también, tuvimos la oportunidad de ir a Seattle, de grabar una sesión en KEXP que es esa radio, ahora ya muy clásica.

—¿Qué tal fue esa experiencia? Es una plataforma mundial y las sesiones en vivo son un clásico de esa radio.

—Pienso en eso, que hay una vitrina para la música independiente que es de muy buen nivel. También es una radio que funciona con donaciones. Realmente hay una gran red que sustenta este proyecto porque si es un proyecto muy bueno, ahora ya es reconocido mundialmente porque tiene su sello. Seattle sobre todo, que es una ciudad muy musical, donde han nacido muchas bandas y artistas, y que si han tenido la suerte de tener esa alianza con un medio que se interesa mucho por la música. De ahí nacen o emergen muchos proyectos musicales que la radio aprecia mucho y que los muestra al mundo. Fue una experiencia súper buena, todo el estudio, las personas que trabajaban ahí, todas son súper interesadas en la música y tienes muy reconocido, apreciado, que valoran mucho tu trabajo. Eso se siente súper bien.

—¿Cómo definirían el momento en el que se encuentra la banda hoy en día?

—Estamos en un completo renacer, porque sí es una etapa nueva lanzar este disco. Marca un ciclo muy importante para nosotras, como banda.

—¿Se vendrán nuevos conciertos para presentar en vivo estas nuevas canciones? ¿Algo que nos puedan adelantar?

—Por ahora, solo estamos concentradas en que el disco salga y tener este disfrute del lanzamiento. Más adelante vamos a ver si programamos algo, pero todavía estamos enfocadas en esto.

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