“Hoy día soy afortunada, me va muy bien, porque me lo gané”, reflexiona Pamela Díaz bajando de su auto toda glamour y felicidad entrando al cumpleaños de su pololo Felipe Kast hace un par de semanas.

Y la mujer que tiene a cuestas una carrera de 25 años dándole y dándole, superando concursos de belleza que no ganó, canales que la echaron, parejas que la defraudaron y obstáculos de todo tipo en la televisión, se detiene por unos minutos para realizar un análisis del momento que vive.

Hoy la ex “fiera” está en el top. Coanima su propio espacio diario, en la tardes de Canal 13 y maneja un pequeño imperio en las redes, donde suma 3,1 millones de seguidores en Instagram y 622 mil suscriptores en su canal YouTube con entrevistas a medio mundo, desde Evelyn Matthei a Fran Maira. Y pololea con el senador que la adora y salió a buscarla a la puerta en su cumpleaños.

En la entrada de la fiesta estaba la periodista Karina Vergara, una de las fundadora de Glamorama, actual colaboradora de este portal y quien conoce desde hace 20 años a Díaz. Por esa confianza, la comunicadora dio espacio para una breve conversación:

Pamela Díaz: “Estoy bien nomás. Solo eso pueden ver... ¿Sabes lo que me pasa?. Y te lo voy a confesar solo a ti: siento que hoy la farándula que volvió no es la de nuestros tiempos. Yo llevo veintitantos años y sentía que era mucho más ubicada en ciertas cosas. Yo no le tiro mierda hoy día, porque no quiero pasarla mal…”

“¿Pero no te gusta la industria que hay hoy?”

“Me cargan las mentiras. Y como hoy día no me puedo... Porque tengo muchas marcas. Y me pasó algo heavy: después de la pandemia hay weones que quedaron iguales o peores y se fueron a la mier... Y otros que evolucionamos en ciertas cosas. Y hay cosas que a mí no me parecen, no estoy de acuerdo”

“¿Pero personajes, periodistas, rostros?”

“Es que me cargan las mentiras. Odio la mentira. Tú estás hoy día acá, ¿por qué no hay siete weo... de la tele? ¿Por qué no hay ocho cámaras? ¿Por qué estás tú acá sola?. Y yo te doy la entrevista porque me caes bien y nos conocemos hace 20 años. Y muestra la entrevista igual como te estoy hablando, por favor, para que la gente entienda que nosotros nos conocemos hace años, cuando éramos pobres como una rata.

“Fuiste un poquito más famosa y tienes que bajar el vidrio porque hay cabros que están igual que nosotros pidiendo una entrevista, que pueden ser nuestros hijos, y obviamente no quiero que pasen frío. Y hoy día no hay nadie acá”

“¿Y qué piensas de eso?”

“Poco presupuesto y la tele está difícil. Si yo tengo un canal de YouTube, yo haría el mejor programa. Y es pagar, es buscar marcas, entender a los pendejos, lo que están haciendo, todo lo que es digital. Hoy día no es una cámara, vas con tu celular... Llevamos veintitantos años en esta misma industria; separada, casada, hijos, con problemas.

“Yo quiero pasarlo bien, disfrutar. Hoy día soy afortunada, me va muy bien, porque me lo gané. Todo el mundo dice que soy medio agrandada. No soy agrandada, siempre he sido igual”.

“¿Tú ya tienes claro el cambio de chip en cuánto a cómo quieres estar en la tele?”

“Sí, me ayudó mucho la pandemia y tener hijos adolescentes”.