El artista habría hecho peticiones muy similares a las que tuvo en su paso por Argentina.
Luis Miguel está a pocas horas de realizar el primero de los diez conciertos que tiene programados en Santiago, como parte de su esperado Tour 2023.
Y es que el retorno del Sol de México a Chile es ya una realidad y para que su estadía durante estos días sea lo más placentera posible, habría realizado una serie de peticiones.
El artista que arribó al país en completo hermetismo y sin dejarse ver, solicitó para su camarín velas con aroma vainilla, rosas con tallo largo sin espinas; telas en las paredes “para generar una sensación de confortabilidad”; y agua mineral de una marca específica, según información publicada por La Radio.
Luismi llegó a la capital junto a su pareja, Paloma Cuevas y ya agendó un nuevo concierto para el próximo 2 de marzo de 2024, en un recinto aún por confirmar. Entre las posibilidades, se baraja el Estadio Nacional o el Movistar Arena.
Este nuevo recital de la estrella latina en Chile se concretará un día después de la jornada de cierre de la próxima versión del Festival de Viña del Mar, lo que hace pensar que también podía estar en el certamen.
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