Las dos jóvenes de 26 años deberán cumplir presidio efectivo por el crimen. Fiscalía explicó detalles sobre cómo operaban.
A 12 años de presidio fueron sentenciadas las dos jóvenes bautizadas como las “prostitutas asesinas” del Casino de Viña del Mar. Dieron muerte a un empresario en un caso que remeció a la Ciudad Jardín.
El Tribunal Juicio Oral en Lo Penal de Viña del Mar condenó a las jóvenes de 26 años por el delito de homicidio de un empresario de 60 años, en hechos ocurridos la madrugada del 23 de septiembre de 2023.
Según expuso la Fiscalía, Monserrat y Lissette se presataban como escorts, para luego drogar a sus víctimas con el fin de robarles. Fue así como abordaron al empresario y terminaron asesinándolo en una calle de la ciudad.
Además de los 12 años de presidio, Monserrat sumó tres penas de dos años de cárcel por dos hurtos y fraude electrónico, por engaños similares contra otros hombres. También el tribunal acogió una demanda civil y deberán pagar $30 millones.

Cómo operaban las “prostitutas asesinas” del Casino de Viña
De acuerdo a los antecedentes del Ministerio Público, Monserrat y Lissette acudían con cierta frecuencia al reconocido establecimiento viñamarino con un claro objetivo. La Fiscalía supo de al menos cinco víctimas, una de ellas violentamente asesinada.
Un sobreviviente contó cómo operaban: “llegaron sorpresivamente, mostraron los pechos y se identificaron como prostitutas que trabajaban con el casino”. El hombre les invitó un trago y mientras servían él fue al baño. Al volver, su copa ya tenía la droga. Solo se acuerda que de pronto se vio con un golpe en la cabeza y la cara ensangrentada. Le habían robado 15 millones de pesos entre dinero y relojes.
El caso más grave fue el homicidio de un empresario de 60 años, ataque que quedó grabado minuto a minuto por distintas cámaras de seguridad, según exhibió T13. Fue a eso de las 3:00 de la madrugada del 23 de septiembre del 2023 cuando las jóvenes comenzaron a conversar con el hombre y tras pasar un rato, lo invitaron a otro lugar. Al pagar el estacionamiento, Monserrat vio la clave de la tarjeta bancaria de su víctima y la anotó en su celular.
El hombre y las muchachas salieron en la camioneta y en un servicentro, la cámara captó que el hombre ya no estaba al volante.
De acuerdo a la PDI, al no encontrar un motel, el fármaco fue perdiendo su efecto y las jóvenes habrían decidido ahorcar a la víctima con su propia bufanda, al interior de su camioneta.
Casi dos días después su hijo encontró el vehículo abandonado en una calle. Su padre estaba en el interior, fallecido, boca abajo sobre el asiento trasero.