Clínica de la muerte sigue "embelleciendo" pese a sumarios

Han pasado 10 meses desde que Tania Cea (20) se sometiera a una cirugía estética. Lo hizo justo antes de partir con su marido a su soñada luna de miel en el Caribe. Quería lucir estupenda, por lo que puso su confianza en el equipo médico de la clínica Acuario, en Providencia. No sabía que realizar esa operación sería lo último que haría en su vida. La joven ingresó el 12 de marzo al lugar, pero salió de ahí en una camioneta del Servicio Médico Legal sin signos vitales.

Ese mismo día, pero horas después, la Secretaría Regional Ministerial de Salud Metropolitana clausuró el centro de estética. Sin embargo, tras el sumario volvieron a abrir sus pabellones bajo otro nombre: Quantumm, Medicina Estética e Integral, a cargo del mismo médico, el doctor Jorge Sepúlveda, y que anteriormente también le puso otro nombre al lugar, MyE.

"Me intervinieron una y otra vez para arreglar la embarrada que me hicieron. Sepúlveda tiene la especialidad de anestesiólogo, no de cirujano plástico", señaló una afectada que no quiso entregar su nombre, pero que se operó en dicho centro y terminó con el ombligo cerca del pecho.

Más casos

Otro de los que sufrió bajó el bisturí del equipo médico, encabezado por Sepúlveda, fue Francisco, quien se sometió a una rinoplastía, una liposucción y una ginecomastía, terminando irreconocible frente al espejo.

"La nariz (de mi cliente) perdió funcionalidad, las fosas nasales quedaron diminutas, se debe sonar o rascar con cotonitos. Los médicos no se hicieron responsables de estos horribles resultados", contó a La Cuarta, Isabel Margarita Sánchez, abogada del estudio Pro Iuris Abogados, quien representa a Francisco.

"Mi representado ha tenido pensamientos autodestructivos, graves problemas sicológicos y que le han afectado su desempeño laboral", agregó la defensora.

Normativa y proyecto de Ley. "Que un centro de este tipo cambie regularmente de nombre debería hacer pensar que algo raro ocurre. La formación de un cirujano plástico es un largo procesos que implica evaluación y, por ende, posterior certificación como especialista. Antes de operarse hay que fijarse en el triángulo de seguridad: paciente informado que conozca los riesgos de la operación; cirujano acreditado y un establecimiento que entregue seguridad y cumpla con los requerimientos", explicó Claudio Thomas, presidente de la Sociedad Chilena de Cirugía Plástica.

"En Chile hay una ausencia de regulación para las especialidades médicas. Este proyecto de ley busca regular lo que está pasando en el ámbito de la cirugía plástica de embellecimiento", agregó la diputada Ximena Ossandón (RN), respecto al proyecto de Ley presentado en octubre.

La Cuarta intentó en varias oportunidades concretar una entrevista con el doctor Sepúlveda, sin embargo no hubo respuesta.