Pacientes críticos bajan de 100 y 14 regiones disminuyen casos

Una luz de esperanza en la lucha contra el coronavirus se dejó ver en las cifras del último reporte diario del Ministerio de Salud.

Según informó la autoridad, por primera vez desde el inicio de la pandemia, el número de pacientes críticos internados en las Unidades de Cuidados Intensivos bajó de los 100 casos, llegando sólo a las 96 personas, noticia que fue destacada por los especialistas de la salud.

Es el caso del académico del Magíster de Salud Pública de la Facultad de Ciencias Médicas de la Usach, Claudio Castillo, quien atribuyó esta baja al buen trabajo de la primera línea contra el Covid-19.

"Esa cifra da cuenta de que hay menos casos de personas que necesitan hospitalización y se agravan, y da cuenta también de que los equipos médicos están usando la experiencia que han obtenido en el transcurso de estos meses, a pesar de que es una enfermedad relativamente nueva", comentó.

En cuanto al avance del virus, el ministro Enrique Paris destacó además que "se continúa registrando una disminución de los casos nuevos, alcanzando 12 por ciento a nivel nacional en los últimos siete días. Asimismo, 14 regiones disminuyen sus nuevos casos en los últimos siete días y ocho en los últimos 14".

Sobre este punto, la directora de la Escuela de Enfermería de la UDLA, Mónica Valenzuela, agregó que son noticias positivas que llegan en un momento crítico para el cuidado de los chilenos.

"Están subiendo las temperaturas por la llegada del verano y la gente empieza a salir más. Eso sumado a que empiezan a bajar las cifras hace que la gente se tienda a relajar y ya podemos ver como resultó eso en Europa, donde están pasando por una segunda ola", comentó.

Zona roja

A pesar de que estas cifras son esperanzadoras, las alarmas siguen encendidas en la Región de Magallanes, donde según datos del último informe epidemiológico, la tasa de incidencia acumulada es de 5.570,1 contagios por cada 100.000 habitantes.

Sin embargo, para el infectólogo de la Usach, Ignacio Silva, esta segunda ola por la que pasa la región austral no tiene las misma características que la primera que afectó al país, y esto tendría relación con la baja de los pacientes críticos.

"Pareciera ser que los casos nuevos, de estos nuevos brotes, son menos severos y que además afectan a población más joven. Por supuesto que en un número tan importante de casos aumenta la demanda de camas, pero el porcentaje de pacientes graves que necesitan soporte de ventilación es menor en esta segunda ola que en el brote inicial", aseguró Silva.