Para "Vitamina" Sánchez siempre sale el sol: agarró el buzo aún tibio de Iquique

Que el sol siempre sale después de la tormera lo puede decir, aparte de la guapa Michelle Adams, el intrépido Pablo Sánchez.

Es que luego de un semestre sumido en la cesantía, el "Vitamina" tomó el tiempo sin pega más bien como unas merecidas vacaciones, que le permitieron regresar en tiempo récord a la actividad ahora en el norte del país.

Esto, luego que Iquique ayer anunciara con bombos y platillos al rosarino de 45 años como el flamante estratega para el 2019, que vino a ocupar el buzo aún tibio que dejó recién Luis Musrri.

Revancha

Para Sánchez, que salió por la ventana del "Ever for ever"no sólo por los malos resultados, sino que por la lluvia de puñales adentro del vestuario, donde varios jugadores lo acusaron de faltar a los famosos códigos de camarín, será la ocasión de limpiar su imagen dañada.

Es que cuando le aplicaron la patada donde la espalda cambia de nombre, "Vitamina" había dejado al elenco ruletero en la última posición de la tabla este año. El saldo fue hediondo con 10 derrotas, tres empates y apenas dos victorias en las primeras 15 fechas del pasado torneo.

"Sánchez llega antecedido por grandes campañas en el fútbol chileno, donde logró plasmar un vistoso estilo de juego y clasificar a copas internacionales a los tres equipos que ha dirigido: Universidad de Concepción, O'Higgins y Everton de Viña del Mar", resaltó el "Dragón" del norte en el comunicado de bienvenida al nuevo jefe.

Con este desafío, "Vitamina" sumará su séptimo club tras dirigir Banfield, Rosario Central, Oriente Petrolero, Universidad de Concepción, O'Higgins, y Everton.