En época de revisión técnica, y luego del trajín por los viajes estivales, su joya pudo retornar con uno que otro detallito que frene este trámite. Experto entrega importantes recomendaciones para que regularice su bólido sin dramas.
Uno de los requisitos para renovar el permiso de circulación es que su auto pase la revisión técnica. Por lo mismo, si lo utilizó para salir estas vacaciones de verano a la playa, al campo o se aventuró con algún destino extremo, debe poner ojo a algunos detalles vitales para sortear sin problemas este trámite.
Son varias las "pifias" que pueden afectar a su vehículo durante la revisión técnica, por lo que siempre es bueno conocerlas con anticipación para solucionarlas y así evitar salir maldiciendo a medio mundo.
"Lo más común en los rechazos son ampolletas quemadas, desalineación del tren delantero, daños en neumáticos, falla de eficiencia de amortiguadores y daños en sistema de escape", alerta Carlos Casella, gerente de servicio de Chevrolet de Salfa.
Otra cosa que destaca el experto es la importancia de confirmar el buen estado de los neumáticos, especialmente después de circular por caminos de tierra y ripio, que pueden haber dejado daños en su banda de rodado y flancos, lo que se transforma en un potencial de accidente.
Factores del ambiente
Hay que considerar también que este verano las temperaturas anotaron un nuevo máximo histórico, sobrecalentamiento que además termina exigiendo los sistemas del motor. Por ese motivo, se recomienda revisar todos los fluidos del bólido, incluyendo el refrigerante y el aceite.
De igual modo, es importante verificar funcionamiento de sistema de embrague, frenos y dirección, ya que son vitales para nuestra seguridad.
Si estuvo en zonas afectadas por incendios forestales, eventualmente la contaminación ambiental puede saturar más rápido el filtro de aire, por lo que se recomienda revisar y, dependiendo de su estado, reemplazar.
También se puede ver el estado del filtro de "polen" del sistema de ventilación interna, que puede estar restringido y genera menos flujo de aire hacia el interior del habitáculo. Si amerita, lo recomendable es cambiarlo.
Chequee estos detalles y evítese pasar un mal rato
- Estado de neumáticos (revisión visual y chequeo de presión de los mismos).
- Alineación. Muchas veces se percibe con el solo hecho de soltar el volante en superficie plana y ver si el vehículo cambia su dirección.
- Parabrisas sin piquetes.
- Anclajes de cinturones de seguridad.
- Focos en buen estado
- Patente visible y en buen estado.
- Funcionamiento de bocina.
- Funcionamiento de limpiaparabrisas.
- Escape roto y humo visible.
- Permiso de circulación al día.
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