Eros Pérez: "Es la peor lesión que he tenido en mi vida"

La cirugía máxilofacial del ex lateral resultó exitoza por lo que ahora comienza su período de recuperación. Sin embargo el comentarista de CDF avisa que no se quedará con los brazos cruzados y ahora "el tema está en manos de la justicia".

El duro golpe que recibió Eros Pérez en la Liga Hacienda Chicureo obligó a ser operado por doble fractura de mandíbula.

Intervención que salió exitosa y que tiene al ex UC en recuperación. Pese a ello, el ex lateral mantiene su versión de los hechos y avisó que seguirá hasta el final con la grave agresión que sufrió.

"Me pusieron placa de titanio. Fue cirugía compleja y ahora sigo una dieta blanda. Solo puedo tomar sopas, jaleas, helado y harta agua. Es la peor lesión que he tenido en mi vida. En la columna tuve otra pero pude recuperarme bien. Esto me puede dejar una secuela facial que es lo que me tiene más preocupado", recalcó a LaCuarta.com.

-¿Qué le pareció la versión que dio la Liga Hacienda Chicureo sobre lo ocurrido?

Estoy molesto porque le han bajado el perfil. Él me amenazó que me iba a lesionar. Le dije a sus compañeros que lo calmaran. Le avisé a un asistente de la liga. Lo sacaron de la cancha pero en el segundo tiempo entró de nuevo y me dijo "en cualquier momento te jodo". Siento que esto se dio por una frustración por no haber sido jugador profesional. En las imágenes se ve claro como de forma premeditada y alevosa, y sin provocación alguna, me causó una fractura doble de mandíbula.

-Me imagino que no se va a quedar de brazos cruzados...

Esto esta en manos de la justicia. Imagínate que a mi me contrataron para dirigir y entrenar. Promovemos valores del trabajo en equipo y disfrutar del equipo. Eran el rival más débil. Pero desde que llegamos en cinco partidos ganamos todos y anotamos 31 goles. Es mi única forma de defenderme.

-¿Y hay fecha para el retorno?

Ya me retiré profesionalmente hace 7 años. Pero con esto ahora lo hago definitivo. Ese día estaba mi señora, con mi hijo de 2 años y mi guagua de 7 meses y aún sigo en shock por el momento que viví. No voy a volver a jugar. No quiero pisar una cancha de fútbol. El daño psicológico es terrible.

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