Lea la columna de Vasco Moulian: "Contra el estigma del qué dirán"

Cuando todo parece estar bien para la actriz Javiera Díaz de Valdés, en su rol de "Agustina", con la nueva imagen después de la cirugía plástica en la exitosa teleserie de Mega "Verdades Ocultas", se le rompen los esquemas, protagonizando un grave accidente automovilístico en la comuna de Peñalolén, el pasado lunes 21 de mayo, a las 13.00 horas.

Cuando recién lees los titulares, te imaginas lo peor: o que alguien murió, que posiblemente fue en la madrugada bajo la influencia del alcohol o que se arrancó de los carabineros, pero no fue así.

La actriz de Mega, muy preocupada por lo sucedido, llamó de inmediato a una ambulancia y se hizo cargo del tema, más allá de quién haya tenido la culpa.

Aquí es cuando el ser famoso te juega en contra y cuando automáticamente el morbo de nuestras cabezas recuerda la historia de su ex pareja (Pablo Mackenna), involucrado en más de un incidente con la justicia.

Es aquí cuando uno se hace la pregunta: ¿por qué las figuras de la televisión deben dar explicaciones en este tipo de situaciones complejas, además del calvario que están viviendo?

Yo antes de juzgar o magnificar el tema, esperaría el resultado de la investigación que dio el juez, por 120 días.

Recuerden que mandamos a Garay a una clínica en Francia y terminó en la cárcel y, viceversa, ponemos en duda a una actriz cuando la frase "accidente de tránsito" circula por los titulares.

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